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Vicky perdió su corazón

“la amistad a veces te lleva por caminos insospechables, y si es verdadera, mientras los recorres va sacando lo mejor de tí en cada paso que dais juntos..
Julía quería decirle a su amiga, en el día de su boda, lo especial que era para ella…y así nació este cuento“

 

Os voy a contar un cuento…

En un precioso jardín lleno de majestuosos árboles, flores exóticas y una fuente de piedra enorme rebosante de agua cristalina… un anciano sabio encontró a una muchacha de cabellos dorados, llorando desconsolada.

–          ¿Por qué lloras muchacha? -le preguntó el anciano

–          Porque mi mejor amiga hoy va a casarse y ha perdido su corazón -contestó la muchacha entre lágrimas

El anciano la tomó de la mano y cuando se hubo tranquilizado le dijo:

–          Querida, pero ¿por qué te preocupa esto de tu amiga? ¿Quién es tu amiga?

Entonces la muchacha, se sentó junto al anciano y le contó esta historia:

“- Mi amiga se llama Vicky. Vicky es especial. Mi amiga se casa hoy después de 18 años de amor incondicional y habiéndome regalado un año lleno de ilusión y de sueños que hoy se van a cumplir, porque preparar esta boda me ha proporcionado una inmensa felicidad. Pero no solo me ha regalado esto, desde que la conocí, me ha estado obsequiando con risas de complicidad, ratos inolvidables, abrazos cuando se necesitaban y cuando no también, su apoyo en momentos difíciles.  Compañeras en una profesión tan humana como es la nuestra, me ha enseñado muchísimas cosas. Luchadoras de causas comunes. Hermanas, su hermana mayor como me suele llamar en ocasiones, me ha ayudado a ser mejor persona.”

–          El anciano escuchaba a la muchacha atentamente

La muchacha con la mira encendida y emocionada prosiguió:

“- Además, mi amiga Vicky posee una belleza única, se desvive por los demás, contagia alegría. Risueña siempre. Todos la quieren, pero antes ella nos quiere a todos…” -de repente la muchacha dejó de hablar y volvió a romper en llanto.

El anciano, sin embargo, a pesar del derroche de lágrimas de la muchacha, comenzó a reírse a carcajadas.

La muchacha no daba crédito, se levantó e indignada dijo al anciano:

– ¿Qué te hace tanta gracia? ¿No te he dicho que mi amiga Vicky ha perdido el corazón?

Entonces el anciano, manteniendo su sonrisa le dijo:

–          Querida, si realmente supieses que es la amistad, comprenderías que, tu amiga Vicky ha perdido el corazón porque se lo ha entregado a los demás.

FIN